"LA CULTURA DEL DESBORDE"

"LA CULTURA DEL DESBORDE"

Fuente: César A. Schenone Oliva

Lima, 25 de Noviembre de 2011

Los intensos cambios vividos a propósito de la migración andina ha originado la cultura de los nuevos pobladores de la ciudad, aquellas comunidades que nacieron en los cerros y arenales, más conocidos como; asentamientos humanos, pueblos jóvenes, quienes articularon los talleres, mecánicas, mercados populares, ambulantes, etc., etc., Sin dejar de mencionar las fiestas patronales andinas y la fusión del huayno y la cumbia costeña cuya primera elaboración es la “Cumbia costeña” o “Chicha” de los años 80 lo que les permitió enlazarse con los grupos criollos de los puertos y los barrios populares.

Allí donde se muestran las barriadas limeñas convertidas hoy en tres grandes conos metropolitanos, donde viven más de cinco millones de personas; es decir más del 60% de la población de Lima, para darles una magnitud de pueblos jóvenes, los conos agrupan a 13 de los 48 distritos capitalinos, muchos de ellos con nombres extensos e impronunciables, extendiéndose por el norte; hasta Ancón, por el sur; hasta Pucusana, y por el centro; hasta Chosica, edificaciones hechas por ellos mismos, sin la más mínima planificación, sin los elementales estudios de suelo, incluso sin orden urbano. Todo lo que una ciudad precisa para ser considerada ciudad moderna, lima muestra hoy la impronta pluricultural y multilingüe de sus habitantes, donde se enlaza lo andino, lo costeño y lo selvático, esa cultura popular mestiza, irreverentes con esta ciudad que los alberga, que continua luchando por alcanzar su reconocimiento y su ciudadanía plena, sin obtenerla aún, una dinámica insólita que afecta toda la estructura social, política, económica y cultural. Se trata de un desborde de las pautas institucionales que cuestionan la autoridad del Estado, alterando las reglas del juego establecidas y cambiándole el rostro al Perú, creando nuevas pautas de conducta, valores, actitudes, normas, creencias y estilos de vida, lo cual significa uno de los mayores cambios de toda nuestra historia.

Como consecuencia de esto, el Perú está sufriendo serias alteraciones y que lo vemos reflejado en todas las crónicas policiales; violaciones a menores, pedofilia, incestos, parricidios, apropiaciones ilícitas, traficantes de tierras, sicarios, marcas, pandillas, bullying, suicidios, etc., etc., este es el nuevo rostro que pugna por emerger de la actual confusión en que se halla, una situación de la magnitud como la que se vive, no se resuelve con medidas asistencialistas de carácter administrativo, sino reformulando las bases políticas, sociales, económicas y culturales, caso contrario, el desborde social continuara agravándose con huelgas, bloqueo de carreteras, chantaje político, demandas absurdas como las que pretenden las hordas anti mineras y que lo vemos a diario a través de las imágenes de los noticieros. Por lo que para muchos de nosotros la idea de desborde está estrechamente ligada a tres ideas básicas; la relación intensa entre amigo y enemigo, la confrontación violenta con nuestras fuerzas del orden y la imposición del actor victorioso en todos los campos de la vida social.

Lima, 25 de Noviembre de 2011

“Nadie que se precie de patriota debe estar al margen del conflicto social en que se vive, quienes creen ser neutrales, con su aparente evasión apoyan al bando agresor. Pero bueno, más alla de las reacciones, agravios, vetos, protestas, descalificaciones, tropiezos, sancadillas, denuncias, debemos de reconocer que todo lo malo en algún momento sale a relucir...”