UNA VIDA CON SENTIDO

UNA VIDA CON SENTIDO
(EB-noviembre 2009)

Tiene 14 años, mide 1.80 m, se llama César David Leyton Arce. Es un joven estudiante del IIIº de secundaria en el colegio peruano-francés André Malraux, en la localidad de Surco, donde cercanamente vive. Dicen que es el mejor alumno en aprovechamiento de su sección. Es educado, tiene autoconfianza, firmeza y voluntad para decidir, es independiente, creativo, y evoluciona con una inteligencia que sorprende. Hace composiciones literarias en inglés, español y francés. Personalmente lo vi manipular una computadora cuando él tenía 3 años y me sorprendió para empezar a observarlo en sus adelantos científicos. No hay duda que estamos frente a un portento de sabia formación y de inteligencia privilegiada. Es un buen hijo, por tanto un buen hermano y buen amigo. Vive con sus padres y sus hermanos y comparte con ellos la alegría que le dispensa el hecho de ser una familia unida y progresista.

Pero la felicidad nunca es completa, César David ha sido diagnosticado en menos de tres meses de un terrible mal: LEUCEMIA . Al principio se quejaba de dolores en la cadera, y después en los huesos. Era fácil pensar que un crecimiento desmesurada para su edad tenía que ver con el cambio de estatura de los adolescentes, pero eso quedó en suposición. En el Hospital Rebagliati de la ciudad de Lima, los médicos intentaron aislarlo, limitaron sus visitas, lo protegieron de cualquier virus dañino, hasta que finalmente luego de ingresar y salir del mismo hospital varias veces, optaron propiamente por desahuciarlo.

Aquí juega el amor de una madre que hace lo que sea para agotar cualquier recurso en el planeta por recuperar a su hijo. Ella Alina Arce, adivina que hay un lugar en donde su hijo recibiendo mejor tratamiento, puede al menos llevar una mejor vida. No le importa haberse distanciado de su trabajo en la Fiscalía de la Nación, ha asumido con valentía admirable y con una ternura que envidiamos, la cura de César David. Por ello, logró enrumbar con su hijo en un avión y regresar a ese país donde meses antes estuvieron de paseo, y ahora volvían para buscar un remedio, un médico, un hospital como el Hartford Childrem's Hospital que les brinde la solución que esperan, y que nuestro país no ha podido brindarles.

Gestos conmovedores de los padres de familia y alumnos de su colegio organizando actividades para reunir dinero para que César David y su madre puedan llegar a ese hospital y no les falte nada. Los chicos de la promoción que egresa el 2009 donaron el íntegro de su capital de fiesta promocional para esta causa. Otros organizaron rifas, sorteos, funciones de cine, etc. para recaudar la mayor cantidad de dinero. Detrás de todas éstas actividades una familia que sufre, una familia que espera. Un padre el abogado Dr. César Leyton, luchando también por sacar adelante no sólo al hijo enfermo, sino a los demás hijos que se quedan con él en Lima y deben continuar una vida normal en estudios y trabajo.

Son lecciones que la vida nos presenta, para probar nuestra paciencia, para darnos la espalda y hacernos comprender lo que sufren los otros. Son maneras de evolucionar nuestro ingenio para encontrar maravillosas curas a nuestras necesidades humanas. Y desde luego la fe, presente en todo momento, la creencia espiritual que hace grande al hombre cuando se minimiza ante Dios. A buena hora nos prueba el cielo infinito, para ver cuánto podemos si es menester creer en los milagros, que sólo la fe puede explicar.

Estamos a la espera de lo que responda César David al tratamiento, sabemos que él tiene proyectos y esperanzas, valoramos su relación con los amigos y quienes lo protegen y lo ayudan. Entendemos su amor profundo y generoso, pero soñamos que él un día será un investigador, o ingeniero, o recorrerá con su libertad la minería porque gusta de las industrias modernas y también de las matemáticas….

Sólo conocemos su nobleza cuando declara no temerle a la muerte, sino a lo que pueda ocasionar de dolor entre su familia y sus amigos…y eso felizmente dice un poco más de su música interior, aquella que deberá revelarnos su fortaleza para enfrentar este reto…(Yo seguiré esperándolo, para darle un abrazo a este mi sobrino querido.)