Sobre
los ancianos
Fuente:
Mary Fernandez
¿Sabia usted que el 70 por
ciento de las personas mayores que viven en Asilos de Ancianos tienen
familiares?
Si, el 70% de las personas
que están en asilos tienen familiares, y de este porcentaje la mitad no quería
dejarlos ahí, sin embargo ya no podían cuidarlos y se vieron obligados y en la
necesidad de recurrir a estos lugares. Pasa todos los días en muchas partes del
mundo.
Un asilo nunca será el lugar
ideal para los abuelos, ya que por naturaleza humana ellos deben estar
integrados en el círculo familiar, por lo cual el gran desafío de atención
reside en abrir más estancias de día como Casas para los Abuelos, centros de
desarrollo, lugares para dejarlos por unas horas, como lo hacíamos con nuestros
hijos cuando eran pequeños, deberían de abrir muchos lugares así, diseñados
para personas de la tercera edad, mientras los hijos trabajan para que no se
queden solos y desatendidos.
Sé que este tipo de lugares
o estancias serian en parte una solución para los hijos que ya no pueden dejar
solos a sus padres, pues es una cruda realidad que algunas personas corren
peligro cuando están sin vigilancia, pueden abrir las llaves del gas, del agua,
caerse, quemarse, o lastimarse. Tantas cosas pueden pasar.
Conozco muchos asilos de
ancianos, en Miami hay muchos lugares que se dedican a este tipo de servicio,
cada vez que puedo los visito, me llenan de ternura, me piden caramelos y que
les lea mis poemas, lo hago porque sé que están muy solos, porque aunque la
mayoría tienen familiares, viven esperando que los hijos cumplan con la promesa
de que irían a visitarlos a diario, promesa que se va desvaneciendo con el
tiempo y poco a poco se van distanciando los hijos, por múltiples razones, pero
el hecho, la triste y dura realidad es que los abuelos se sienten solos y
abandonados, y como se sufre, a mi se me parte el alma cuando los veo llorar,
cuando alguna anciana me abraza y me acaricia el rostro pensando que soy su
hija adorada, y yo la lleno de besos y le digo “te quiero mucho mamita linda” y
veo como se le iluminan los ojos y en sus labios de dibuja la mas hermosa de
las sonrisas.
Hijos de padres que viven en
asilos de ancianos, recapaciten, piensen, sientan, entiendan de una vez que
para los ancianos, los adultos mayores, es muy doloroso que no llegue la visita
esperada, para ellos es fundamental el contacto con sus seres queridos, poder
verlos, poder oírlos, un beso o un abrazo de sus hijos y nietos por quienes
dieron todo y a cambio reciben su larga ausencia. Muchos los dejan para siempre
abandonados. Algunos se acuerdan de ellos dos veces al año, en su cumpleaños o
en la Navidad, ¿es acaso suficiente una o dos visitas anuales para tranquilizar
sus conciencias?
En cada asilo que visito me
encuentro que cada caso es diferente, no obstante para los que cuentan con la
fortuna de tener familia el único anhelo es que no se olviden de ellos, pues
gran parte de su tristeza es por sentir el cruel abandono. Que frialdad, Dios
mío, cuanta indiferencia, cuanta ingratitud.
Siento que el lugar de los
abuelos es en casa, deben estar insertados en la dinámica familiar, no se les
debe excluir y aislarlos. Siento que como hijos, cuando nuestros padres llegan
a la tercera edad no debemos ni podemos olvidarlos… todos vamos camino a
viejos… o casi todos, porque todos no llegamos a esa parte del camino muchas
veces.
Abrir Casas o Centros para
los Abuelos es una magnífica alternativa para apoyar a los hijos que trabajan y
para mantener a la familia unida, que el adulto mayor no se aleje de la
convivencia cotidiana. Allí podrían pasar de 8 a 10 horas diarias. En la
estancia de día los abuelos se sienten identificados, el trato con personas de
su misma edad les hace darse cuenta que no son los únicos a los que ya les
duelen las rodillas, que les cuesta trabajo concentrarse, que se les olvidan
algunas cosas, entre otros aspectos que son comunes.
En este tipo de centros se
pueden brindar talleres preventivos y de atención para que no minen sus
condiciones motoras y cognitivas, se les estimularía a realizar
acondicionamiento físico, participar en actividades de agilidad mental para
actualizarlos sobre los hechos importantes en su entorno social y también para
ubicarlos en el tiempo.
Es uno de los proyectos
futuros de Centro Luz de Almas, siento que el futuro en la atención del adulto
mayor está en las estancias de día, en donde se les podría brindar atención
física y mental, además de ser un buen sitio para aprender artes y oficios,
desarrollar creatividad, destrezas o conocimientos de manera colectiva, entre
otro tipo de actividades enfocadas a su bienestar y recreación.
Para poder cumplir con mis
proyectos necesito de la colaboración de muchas personas, y que Dios siga
iluminando mi pluma, poder seguir escribiendo para aliviar el hambre, para
ayudar a los pobres, a los pequeños, y darles una mejor vida a los ancianos, a
los adultos mayores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario