VULGARIDAD EN LA WEB?
(EB-23 NOVIEMBRE 2010)
La vulgaridad se pone de moda también en Facebook. Sí, aunque usted no lo crea, estoy llegando a la conclusión que el internet es la “Torre de Babel del siglo XXI”…pues llega ya el día donde nadie se entenderá en él. Siendo un excelente medio de comunicación, identificación y reencuentro con nuestros más preciados amigos y familiares, es una pena que haya gente desconsiderada que lo está convirtiendo en una letrina de sus groseras expresiones y sus estimulantes empresas de la vulgaridad. No se debe permitir que se adquiera un espacio del Facebook para decir sandeces, estupideces, o simplemente expresiones vulgares carentes de todo respeto por quienes hacemos uso de él: niños, jóvenes, adolescentes, adultos, mayores, tal vez ancianos, profesionales, religiosos, maestros, artistas, etc. y los otros: los que viven porque deben vivir, los que les cuesta trabajo entender que somos una sociedad que disfrutamos de derechos y obligaciones. Las frustraciones de edad, frenéticas manifestaciones de crecimiento equivocado y hormonas mal gestadas, son para la visita periódica al psiquiatra, psicoterapeuta, médico de cerebro y otros títulos más…no para un medio en el que quienes ingresamos queremos leer, interrelacionarnos, centrar nuestra vivencia, y tratar de afiliarnos a una mentalidad común, donde respetos guardan respeto.
En otras webs de contactos, los mismos usuarios han levantado su voz de protesta y han terminado expulsando a los degenerados(as) que cuelgan fotos íntimas, usan lenguaje procaz, jaquean los correos y datos de otras personas, y finalmente usan las webs de amigos para timar gente que en su poca sanidad de humildad se dedican a contar, publicar y comentar sus avances y logros económicos, lo que pone en el ojo de la tormenta y la mira de delincuentes… a todo el que cometa el pecado de la publicidad arribista…
Las intimidades de pareja, no pueden publicarse en un medio donde millones de personas se enteran si estás reglando, o estás haciendo el amor, o estás regalándole cuernos a tu pareja. Para esos contables secretos, tienen otras webs donde la pornografía se abraza con la vulgaridad, la indecencia, el morbo y hasta el crimen.
Y es que si no ponemos freno desde ahora al mal uso del internet, terminaremos todos en una maleta tirados en la playa, usaremos las webcam para hacer sexo a distancia; invadiremos nuestra propia privacidad, comentándola en el Facebook; nos instalaremos como algo natural en una empresa de “voyeurs sociales” y nos convertiremos en la industria destructora de lo que aún nos queda de seres inteligentes, pensantes con capacidad para considerarnos humanos. Se repetirá la historia de la televisión invadiendo nuestros hogares sin ninguna norma de su utilización, o posteriormente los beepers y celulares por un camino igualmente equivocados. Lo que ha conducido a las instituciones a prohibir el uso de los mismos dentro de sus instalaciones, so pena de castigo severo y hasta de expulsión.
Estamos a tiempo para que el Estado, las instituciones educativas, y otros que albergan o reciben multitudes, puedan normar. Asumo por lo observado, que no pasará mucho tiempo que en escuelas y colegios del país se prohibirá el uso del celular, por todos los aportes negativos que ello significa: tomar fotos que luego se cuelgan en la red, usar el medio para comunicarse con la calle, o para escuchar música durante las horas de clase, etc.
Igual sucederá con el mal uso de las laptop en las aulas universitarias, y con los programas personales de Internet en las empresas. Totalmente prohibidas, por el abuso, la negligencia, el olvido de la tarea o función en la empresa, atraso en la producción, distracción ajena a los intereses del contratista y el internet y toda la tecnología se convertirá en medios desmasificados y exclusivo de uso privado.
Así puede acabar una etapa de revolución en las comunicaciones, una extensión de lo contemporáneo en otras áreas del manejo humano, en la configuración de una tecnología que al no educar, la aplicación del aprendizaje y uso, se convierte en algo no claro.
Esperemos pues, que quienes regulan estos medios, particularmente el Internet, ayuden a que en un futuro cercano, sea fundamental saber usar lo para el mercado inteligente, pero también para recordarle al hombre que es el ser más capacitado de la naturaleza…hasta que en otro momento nos demuestren lo contrario.
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