EL AÑO NUEVO
(EB-31 DICIEMBRE 2010)
Las cábalas son creencias que la gente difunde, muchas veces sin comprobar lo que creen. Vano intento de quienes piensan que un baño con flores o en el mar, devorar uvas, dar vueltas a la manzana con maletas, bañarse con vino o champan, atorarse con sahumerios en casa, encender velas, ponerse ropa amarilla, roja o blanca, etc. pueda cambiar o mejorar de la noche a la madrugada una vida. Nuestra vida se hace con esfuerzo, con entrega, con estudios, con interrelación con los otros seres humanos. El que nos vaya bien o mal, depende de muchos factores externos e internos. Nos preparan nuestros padres y nos preparamos nosotros para lo que queremos alcanzar en la vida. Unos prefieren el aroma de las flores y otros el olor de la lechuga. Unos prefieren contarse a si mimo historias de sueños irrealizables, construir sin un cimiento gótico, vestirse de debilidad, asirse a la arena sin contar que la próxima ola lo arrastrará para perderlo en las profundidades del océano.
Las cábalas es un engaña muchacho. El mejor negocio de agoreros, brujos, y publicistas del engaño cada inicio del nuevo año. Si miro el cielo y deseo alcanzarlo, sólo debo estirar mis manos para llegar a él. Si caigo una y otra vez, y aprendo a levantarme, estoy más cerca a triunfar. Si creo en mí, y asumo la fuerza y la capacidad de ganar, supremo será el logro para alcanzar. La rutina mata, la amenaza nos encierra, la cobardía nos aleja, el silencio nos atemoriza. En cambio, el tener coraje nos renueva, el buscar la santidad nos idealiza y mistifica. El pensar nos hace visionarios de un mundo mejor. Los grandes personajes se levantaron cuando cayeron, y respiraron fuerte para desnudar su alma y llegar a la verdad. Sólo queda que nosotros aprendamos las lecciones de nuestra vida persona, mirando de reojo lo que sucede con los compañeros del colegio o la universidad, los amigos del barrio, los miembros de la familia…y así las cábalas perderán significado social y psicológico para hacernos ver la realidad por siempre.
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